La Cantina La Gioiosa tiene una historia que se remonta a la década de 1920. El origen de todo es la finca Crocetta del Montello, que conserva la tradición y es el punto de apoyo de su productividad.
Entre las colinas proclamadas Patrimonio de la Humanidad UNESCO, se encuentra la finca en cuyos agricultores , agrónomos y enólogos trabajan para dar vida al vino que ha marcado el éxito de su tierra: Valdobbiadene Prosecco Superiore DOCG. Su finca Nervesa della Battaglia es la primera en obtener la certificación Biodiversidad Friend.
En la finca Spilimbergo conviven paisajes agrícolas y asentamientos históricos que encuentran su lugar perfecto de múltiples viñas, entre ellas Glera, Pinot Grigio, Pinot Noir y Ribolla Gialla.
Las características únicas de este entorno hacen que las uvas sean más azucaradas y con mayores notas aromáticas, base para vinos particularmente frescos, con notas minerales y aromas claros.
Pruébalos, elige Acchiari. Créame, vale la pena.